¿Discos sí o discos no?
March 14, 2017
Hace unos días volvió a saltar la polémica acerca del uso de los frenos de disco en el ciclismo profesional, debido al percance sufrido por Owain Doull. Leyendo un poco sobre el tema, veo que hay muchas y diversas opiniones, pero la mayoría de ellas tienen un objetivo claro: vislumbrar el futuro de estos frenos.
Lo primero que haré será una pequeña comparativa entre ambos sistemas de frenado: los de zapata y los de disco.
Una de las dudas más comunes es el mantenimiento, siendo más sencillo el sistema de frenos de disco, debido al menor número de piezas que lo componen. Pese a ello, el peso es mayor que los del sistema de zapatas.
Ahora bien, el sistema de disco es menos sencillo que los de zapata, y la bicicleta es la definición de sencillez. Por lo que en este apartado se llevan un punto las zapatas. El inconveniente en esta sencillez es el centrado de las ruedas, puesto que a los frenos de disco no les afecta.
Si pedaleamos en mojado, aquí hay que decir que los discos ganan la partida, ya que las zapatas resbalarán sobre la llanta, hasta que esta se seca y conseguimos frenar. Aquí viene el meollo de la polémica, ¿qué pasa si nos caemos rodando en una grupeta llena de estos frenos de disco? Pues bien, podemos hacernos bastante daño, pero también podemos caernos del lado del plato, que también puede generar graves daños. Primero, lo que tenemos que intentar es no caernos. Lo siguiente que podemos pensar es en no montar los discos, ya que así eliminamos un elemento peligroso.
Por último, los discos son más caros que los frenos de zapata. Si bien, con la ley de la oferta y la demanda esto irá cambiando.
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Después de esta miniclase, se puede llegar a la conclusión de que el sistema de frenado con discos parece ser mejor que las zapatas de toda la vida. Pero esta conclusión, en opinión de este humilde servidor, es teórica, ya que dependerá de la modalidad en la que se use cada bicicleta y las necesidades de cada una de ellas.
En el caso del mundo de la BTT, las frenadas son diferentes, si se necesita un frenado más “brusco”, es normal que se monten frenos de disco, puesto que la presión que se debe ejercer en la maneta de freno es menor que en el caso de los frenos de zapata.
Pero esto es solo uno de los puntos donde comparar el mundo de la BTT con el ciclismo de carretera. También se puede hablar de las velocidades que se alcanzan en uno y en otro, y no hablo de velocidades puntuales, y no tenemos que olvidarnos del número de integrantes que forman un pelotón en cada una de estas modalidades.
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Dicho todo esto, creo que hay un factor importante para que cada vez más marcas quieran montar los frenos de disco en sus modelos de carretera: llevan muchos años en el mundo de la BTT y podrían considerar a gente como Marcel Kittel, Vincezo Nibali y un largo etcétera de corredores, como un gran escaparate para darle un empujoncito a las ventas.
También creo oportuno aclarar que cada uno puede montar en su bicicleta lo que quiera y cuando quiera, ya que la mayoría de opiniones expresadas en estas líneas, son eso: OPINIONES, sin ánimo ninguno de convencer a nadie del uso de un sistema u otro.
Y ahora os toca a vosotros. ¿Estáis a favor o en contra de los frenos de disco en carretera? Sí estáis a favor, ¿los protegeríais de alguna manera o los dejaríais cómo están?
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*Imágenes: pixabay.com
